La gente insegura siempre sufre y lo que determina esta
inseguridad es lo siguiente:
Personas con mucha imaginación-
Hay gente a la que le sale un lunar y ya piensa que tiene un
tumor mortal; otra que escucha un ruido fuerte y no dice: “¿qué pasó, qué es
ese ruido?”, sino que afirma: “¡fue una bomba!” y así, con su imaginación, va
más allá de lo que realmente sucede.
Y cuando la imaginación, que es una capacidad muy poderosa,
se usa para pensar lo malo, la persona se vuelve insegura.
Individuos criados en familias “inseguras”-
La inseguridad se contagia. Cuando estás cerca de personas
inseguras te contagias de ellas, porque todo lo que viven lo sienten como un
peligro.
Personas que fueron heridas-
Cuando una persona es decepcionada en el área de los
afectos, automáticamente se activa la inseguridad en todo su accionar.
Piensa en esa persona en la cual confiabas, o en ese socio
que se fue con tu plata, se escapó con todo y además te dejó la deuda… ¿Cómo te
hizo sentir esa situación? Algo que jamás hubieras imaginado que pasaría.
Pero ahora eso ya pasó, y pagaste con esa deuda el aprender
que no tienes que prestarle plata a nadie, y si lo haces, tiene que ser siempre
con papeles. Necesitas recuperarte del fraude, “de los errores se aprende”, si
no, nunca vas a poder cumplir todas aquellas metas que te propusiste.
La inseguridad te hace agresivo, tratas mal a los que te
aman y bien al que no te ama.
La inseguridad no te permite aprender, y al mismo tiempo te
convierte en una persona soberbia. Y el soberbio es como el mal aliento, todos
se dan cuenta, menos el que lo tiene. Y cuando eres soberbio no te dejas
enseñar.
Por eso cuando caminas seguro no necesitas agradar a nadie,
ni convencer a nadie porque sabes quién eres y a dónde vas. Debes vencer la
inseguridad.
Psicólogo :Bernardo Stamateas
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